Diputados chiapanecos indolentes ante el éxodo de familias serranas
* Las y los diputados locales y federales parece que desconocen del hecho y se les olvida que representan la voz de pueblo, simulan ceguera y hacen como que aquí no pasa nada
Javier Opón / Políticamente Incorrecto
En los últimas semanas cientos de familias chiapanecas avecindadas en la región de la sierra han abandonado sus hogares para huir de la ola de violencia que se vive en Chiapas ante la disputa de grupos antagónicos de la delincuencia organizada quienes se disputan el control del territorio, el fenómeno del desplazamiento forzado no es nuevo en Chiapas, puesto se ha vivido desde por lo menos las últimas 3 décadas del siglo pasada, por conflictos agrarios o por ideología religiosa o partidista, a principios de este siglo también se dieron desplazamiento por causas de fenómenos naturales y por causa de la minería principalmente del mineral conocido como varita, que casualmente también se dio en la región de Chicomuselo y Frontera Comalapa, misma que hoy se ven afectada por la intervención de la delincuencia organizada.
La semana pasada el desplazamiento forzado tomó relevancia no sólo a nivel local sino que este fenómeno capto la atención de la comunidad de internacional cuando habitantes del municipio de Amatenango de la Frontera traspasaron la frontera para refugiarse en la municipalidad de Cuilco del departamento de Huehuetenango Guatemala, lo que llamó la atención de la comunidad internacional y de los medios de comunicación tanto nacionales como internacionales, lo preocupante ante este hecho lamentable es que ninguna autoridad estatal se ha pronunciado, por el contrario se han avocado a difundir información institucional donde se asegura que en Chiapas no pasa nada.
Las y los diputados locales y federales parece que desconocen del hecho y se les olvida que representan la voz de pueblo, simulan ceguera y hacen como que aquí no pasa nada, lo que deja en claro el sometimiento de esta institución al poder ejecutivo, la maestra Sonia Catalina quien es la diputada presidente de este poder brilla por su ausencia y deja a cientos de familias chiapaneca de la región de la sierra mariscal a su suerte, pero eso sí, doña Sonia Catalina aseguró una curul en la próxima legislatura para su pequeña hija Catalina Aguiar Álvarez, a cambio de dejar sin voz a las familias desplazadas de esta región, pero ella no es la única que actúa de forma tal vil pues los otros 39 diputados locales actúan con la misma indolencia ante los hechos de violencia y desplazamiento forzado que viven día a día los chiapanecos.
Por otro lado los diputados electos que entraran en funciones el próximo 1 de octubre, actúan como si fueran a recibir un estado pujante y en desarrollo y se olvidan de la situación de violencia en que lo van a recibir, eso sí andan montados en el discurso de la Chiapanequidad, olvidándose de la cultura de la legalidad, de la empatía y de los chiapanecos a los que “representan” porque desde luego que los intereses de las mayorías no son los intereses de los diputados electos.
